Si eres extranjero y quieres entrar a España, sabrás que hay una serie de requisitos que debes cumplir y que son exigibles tanto si es necesario que muestres el visado, como si no.

Los extranjeros de países a los que no sea necesario pedirles visa para entrar a España deben acreditar que cumplen con los requisitos en el momento de entrada al país si las autoridades fronterizas así lo exigen. Si un extranjero que no necesita visado para entrar no cumpliese alguno de dichos requisitos, la entrada a España podría ser denegada.

Sin embargo, si proviene de un país extranjero que requiere visado para entrar a España, deberá acreditar que cumple con todos los requisitos antes de realizar su viaje, solicitando el correspondiente visado en el consulado español de su país.

Algunos de los requisitos necesarios para la entrada en España en calidad de turista son aportar los billetes de ida y de vuelta, medios económicos suficientes para el sustento y manutención durante la estancia, seguro médico y condiciones del viaje, entre ellas el alojamiento, de lo que hablaremos en este post.

Lo más frecuente es que no conozcamos a nadie en España y tengamos un viaje planeado con unas reservas y condiciones determinadas. En este caso, se podrían aportar las reservas del hotel pagadas para acreditar que se dispondrá de alojamiento durante la estancia.

Por otra parte, si nuestra visita a España es para estar con un familiar o amigo y nos vamos a quedar en su domicilio, podremos solicitar una carta de invitación, de modo que pueda ser presentada en el Consulado junto con el resto de documentos solicitados, o bien, llevarlo con nosotros en el momento de cruzar la frontera por si el funcionario nos lo requiriese (en caso de que no sea necesario visado para entrar).

En cualquiera de los dos casos, este documento nos permite acreditar que disponemos de un lugar en el que alojarnos durante nuestra estancia en el país. Sin embargo, es necesario tener en cuenta que esta carta implica la obligación de volver al país de origen una vez finalizado en plazo establecido en ella. Incumplir esta obligación podría tener consecuencias tanto para el invitado como para la persona con la que se alojaría.

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